Dinoautos

Amanda saltó para buscar la pelota que se le había caído. Le daba miedo porque, del otro lado del cerco de la granja, estaban los cinco autos que habían caído allí después de un tornado.

-¿Dónde estará?

-Parate en un auto así ves bien- Le gritó Coqui, colgada de la pared.

Amanda se paró para ver. La pelota había entrado a uno de los autos y había quedado entre el volante y el parabrisas.

-¡Coqui, la vi, pero dentro de uno de los autos. Tengo miedo que haya algún bicho!

-¡Ufa nena! Voy a tener que saltar yo- Entonces Coqui saltó para rescatar la pelota nueva.

-Mirá. Cinco lagartijas.

-¡Qué horror!

-No te hacen nada- Coqui agarró una para asustar a su hermana, pero se preocupó:

-No tratan de escapar. Parece que están enfermas.

-Pobrecitas.

-Tenemos que curarlas.

-¿Y cómo?

-A vos te dan vitaminas, la abuela toma calcio, papá toma esa cosa dietética.

-Suplemento dietario.

- Eso. Mezclamos todo y les  damos para que se pongan fuertes.

-Me gusta tu idea. Pero las tocás vos. A mí me dan miedo.

-Pero las dejamos acá porque el gato las puede asustar.

Con la pelota rescatada fueron a buscar en el cajón de los remedios.

Mezclaron en una botella las gotas de Amanda, trituraron las pastillas de calcio de la abuela y la agitaron.

-¿le ponemos agua? Está muy espeso.

-Dale Coqui.

Después buscaron en la cocina el frasco con el suplemento de su papá.

-Queda poco... ¿Qué hacemos?

-Tenemos que salvarlas. Usamos todo. Total papá y mamá están de viaje. No se van a acordar del remedio.

Entonces vertieron la mezcla de vitaminas y calcio en el frasco y le agregaron azúcar para que tenga gusto rico. Lo escondieron en el laboratorio del abuelo José, a la espera de la hora de la siesta. Solo así podrían pasar del otro lado.

Las niñas no se dieron cuenta de que Simón, el gato, las había seguido y cerraron la puerta dejándolo allí. Simón durmió una siestita, pero cuando se despertó quiso salir. Saltó por todos los estantes buscando una salida. De salto en salto estaba cuando vuelca una botella. El líquido cayó en el frasco que habían preparado las chicas.
Continuará...